La sirenita


Copenhague está plagada de estatuas. Las hay de todos los tipos: mitóloficas, ecuestres, eróticas... y de toda ellas ésta es la más famosa. La sirenita no destaca demasiado si no supieses que se trata de una atracción turística (Nosotros tuvimos suerte y no había más que una pareja haciéndose fotos, pero normalmente hay hordas de descerebrados magreando su triste figura). Para mí es un misterio el porqué de esta fama, y la razón de que sea lo más representativo de una ciudad, que por otra parte, recomiendo visitar.

2 comentarios:

FelpAelástica dijo...

Yo creo que la melancolía de la estatua transmite el mensaje del cuento. De todos modos coincido en que no impresiona mucho. Otro asunto es el porqué de las atracciones turísticas ¿Por qué la gente se pega tortazos por fotografiar la Mona Lisa o La Sirenita y no otras cosas?

Anónimo dijo...

La sirenita es una mujer de mala reputación, decían los vikingos de ella, que miraba desde el mar la llegada de los barriles de cerveza. Eso fue hasta que la obligaron a apuntarse a Alcoholicos Anonimos, desde ese momento se convirtió en el monumento turistico mas famoso de Copenaghe; por eso todos los borrachos daneses, como yo, admiramos a esta santa mujer con cola de pez.